Al metabolismo basal también se le conoce con el nombre de Gasto Energético Basal (GEB) y se puede definir como la cantidad de energía que utiliza una persona sana durante veinticuatro horas (un día), estando en absoluto reposo físico y mental en un entorno neutro.
También podemos definir metabolismo basal como la energía mínima y necesaria, durante un día, para mantener las funciones metabólicas del cuerpo humano (temperatura corporal, recambios celulares, respiración, etc.). Esta energía representa el 50-60% del gasto energético total.
Existen diferentes factores que influyen en el metabolismo basal como pueden ser el tamaño corporal, que a su vez depende del peso y la talla. La composición corporal que está compuesta por el tejido adiposo y que apenas consume energía.Y el tejido muscular que es metabólicamente activo, por lo que requiere energía.
Este factor es el único que podremos modificar a la hora de hacer una dieta para bajar de peso, ya que a mayor masa muscular mayor será nuestro metabolismo basal.
El sexo es otro de los factores importantes que influye directamente en el gasto energético total de las personas. Las mujeres, por lo general, son más pequeñas (menor talla) y tienen menor proporción de tejido adiposo, por lo que su metabolismo basal será menor que el del hombre. De este modo la relación hormonal de cada sexo será otro de los factores que van a influir en el gasto energético total.
La edad es uno de los factores de mayor influencia en el metabolismo basal de cada persona, en la infancia, fase de crecimiento de las personas, se produce un proceso anabólico, por lo que durante esta etapa de la vida el metabolismo basal será superior al de un anciano en proceso degradativo (proceso catabólico). Hasta los 30 años, el metabolismo basal, va en aumento. Entre los 30 y los 40 años se estabiliza y a partir de esta edad, comienza a disminuir progresivamente.
Las horas de sueño es otro de los factores a tener en cuenta para el cálculo del metabolismo basal, ya que mientras dormimos este se reduce casi al mínimo.
La temperatura corporal produce un aumento de nuestra temperatura corporal de 1ºC lo que supone un aumento del metabolismo basal del 13%. La situación hormonal será otro factor a tener en cuenta, hormonas como; las tiroideas, la adrenalina, la noradrenalina, la del crecimiento, etc. Necesitan un mayor consumo de energía.
Otras situaciones fisiológicas especiales como el embarazo, hacen que el metabolismo basal aumente entre un 30 y un 40%.
El clima es otro de los factores a tener en cuenta en el metabolismo basal de cada persona, en países fríos el metabolismo basal es más alto que en los países cálidos, ya que en estos últimos apenas hay pérdida de calor corporal. Así mismo, la situación nutritiva de cada persona también influirá, las personas bien nutridas tienen un metabolismo basal mayor que una desnutrida y enfermedades como la gripe, el hipertiroidismo, las quemaduras, etc. Aumentan el metabolismo basal, aunque otras como la enfermedad de la mosca Tse-tsé lo disminuyen.
Por último, señalar que en los animales, cada especie, tendrá un mayor o menor metabolismo basal según su tamaño. En animales pequeños el metabolismo basal será mayor que uno grande.
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